Una web bonita es importante, pero no sirve de nada si no genera resultados. Aquí entra en juego el marketing digital.
Estos son algunos pilares clave:
Copywriting persuasivo: cada palabra debe llevar al usuario a la acción.
Embudo de conversión bien definido: guía al usuario paso a paso hasta contactarte o comprar.
Publicidad online bien segmentada: Google Ads y redes sociales te permiten llegar a tu público ideal.
Email marketing automatizado: convierte visitas en ventas recurrentes.
¿Sabías que una landing page bien optimizada puede aumentar tu tasa de conversión en más de un 30%?
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